QUINTETOS HISTÓRICOS: CHARLOTTE HORNETS

QUINTETOS HISTÓRICOS: CHARLOTTE HORNETS

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Hoy vamos a hablar del equipo más joven de la historia de la Liga y probablemente, uno de los peores que ha habido en la NBA. Se fundó en 2004, después de que los Charlotte Hornets (que no eran los Bobcats, sino los actuales New Orleans Pelicans) se mudasen a Nueva Orleans. Primeros años muy duros para la franquicia, que no lograba buenas elecciones en los Drafts (Adam Morris, Brandan Wright -aunque lo traspasaron con el que a la postre les ayudó mucho, Jason Richardson- , Emeka Okafor por delante de Luol Deng o André Iguodala...) hasta que Larry Brown llegó al equipo, estampando su filosofía basada en la defensa, y consiguieron visitar los Playoffs por primera y última vez, en 2010, aunque cayeran 0-4 contra los Magic. En 2010 también fue cuando Michael Jordan compraba el equipo y a partir de ahí las malas decisiones tomadas empezaron a lastrar al equipo, consiguiendo en esa misma temporada (la del lockout) el peor récord que jamás ha visto la Liga (7-59). Los Bobcats empezaron una reconstrucción sustentada en Kemba Walker, aunque este no ha demostrado ser un líder, si bien tiene 'clutch' y una capacidad anotadora muy destacable. Jefferson y Batum son los dos otros pilares de la plantilla esta temporada.

BASE: RAYMOND FELTON

Elegido por los Bobcats después de Deron Williams y Chris Paul, nunca llegó a ser una estrella pero en los cinco años en los que estuvo en Carolina del Norte su rendimiento fue bastante bueno y se destapó como un buen base. Segundo jugador con más puntos (tiene a Walker a menos de cien puntos a día de hoy)  y también segundo en partidos jugados de toda la historia del equipo, y el máximo asistente (con casi mil de ventaja respecto a Walker). Lo cierto es que los Bobcats son una plantilla muy joven y es probable que alguien desbanque a Felton de esta posición (Kemba Walker, previsiblemente). Durante las temporadas en las que jugó en los Bobcats, promedió 13.3 puntos y 6.4 asistencias por partido, y vivió, en su última temporada en el equipo, los primeros Playoffs que han visitado los Bobcats, aunque su actuación no fue muy destacada. Tras su marcha del equipo, nunca ha vuelto a jugar a tan alto nivel.

ESCOLTA: STEPHEN JACKSON
Pese a que no jugó ni 150 partidos con los Bobcats, es innegable que merece esta posición por encima de otros jugadores como Gerald Henderson. Es probable que Jackson haya sido el jugador más determinante ofensivamente que haya visto esta joven plantilla, siendo fundamental para ellos en el año de los Playoffs, además alcanzando casi los 19 puntos por partido en 'post-temporada'. Durante sus 2 temporadas en los Cats promedió 19.8 puntos, 4.8 rebotes y 3.6 asistencias. Después de su etapa en la franquicia de Michael Jordan su carrera cayó en picado, pasando por equipos como los Bucks y los Spurs, aunque es cierto que su rol ya no era el de referente ofensivo, sino el de veterano.


ALERO: GERALD WALLACE
El mejor jugador de la historia de la franquicia. Uno de los jugadores más polivalentes que ha dado el baloncesto en este siglo, y aunque no es una leyenda y en pocas franquicias formaría parte del Top 5, en los Bobcats es el líder de este teórico quinteto. Capaz de anotar de muchísimas maneras distintas, es también un consumado defensor, capaz de taponar como un interior y de robar balones como un base ágil de brazos. Máximo anotador y ladrón de los Bobcats, segundo mejor reboteador y taponador y jugador con más partidos vistiendo la elástica del equipo. Es, además de todo esto, el único jugador del equipo en sus 10 años que ha jugado un All Star (lo hizo en 2010). 'Crash' formó parte del equipo desde su primer año (fue seleccionado en el Draft de Expansión) hasta 2011, terminando con unas medias de 16.4 puntos y 7.4 rebotes por partido. Los fans del equipo tardarán en olvidar un hombre que no fue ni el más talentoso ni el más listo, pero que se dejó la piel por el equipo.

ALA-PIVOT: AL JEFFERSON
Pese a solo llevar 3 años en el equipo, Jefferson ha demostrado ser el interior más talentoso que ha jugado nunca en la franquicia y es por eso que está en el quinteto titular aunque no esté ni el Top 15 de partidos más jugados con la franquicia. Big Al tiene unos fundamentos por encima de la media, y en su primera temporada en Carolina del Norte rindió, probablemente, a su mejor nivel en toda su carrera, si no estadísticamente, basándonos en el rendimiento. Dejó atrás su crónica irregularidad y fue el líder absoluto del equipo, guiándolos a los segundos Playoffs de la historia, aunque los futuros campeones Heat les arrollaran en primera ronda. En las dos siguientes temporadas su rendimiento no ha sido tan bueno, siendo en la vigente el peor desde su temporada sophomore. Jefferson debe recuperar la regularidad y dejar atrás los problemas físicos, para volver a ser el pilar de un equipo que tiene muchas opciones de entrar en Playoffs.

PÍVOT: EMEKA OKAFOR
Se trata del segundo mejor jugador de la historia del equipo por detrás de Wallace. Jugó en el equipo desde su año de fundación, siendo el mejor jugador de ese equipo y ganando el premio de Rookie del año, aunque a partir de ahí su rendimiento se quedó bastante estancado y nunca llegó a ser el jugador determinante que los Bobcats esperaban. Durante los 5 años que jugó en el equipo promedió 'doble-doble' en puntos y rebotes, terminando con una media de 14 puntos y 10.7 rebotes. Tercer máximo anotador y máximo reboteador y taponador del equipo, después de su carrera en los Bobcats ha seguido siendo importante para los equipos en los que ha jugado, siendo siempre valorado como un buen pívot, aunque las lesiones han hecho que su rendimiento baje. Junto a Wallace, es el máximo representate de los Bobcats pero al contrario de Gerald, Emeka no pudo vivir los únicos Playoffs que han visitado los de North Carolina.

SEXTO HOMBRE: GERALD HENDERSON
El que más le podía disputar el puesto a Stephen Jackson ya que jugó más años en los Bobcats, pero sus estadísticas y su impacto no han sido tan grandes como la que tuvo el escolta. Es un jugador super atlético, que a partir de su tercer año explotó, aunque da la impresión de que no ha llegado a ser ese jugón que Michael Jordan predijo, llegando a decir que tenía potencial para ser All Star. Es el cuarto máximo anotador de la historia del equipo, con medias de 12 puntos por partido, además de 3.3 rebotes y 1.9 asistencias. Actualmente en Portland.



MENCIONES ESPECIALES PARA...:

MATT CARROLL: Muchos estaréis ahora mismo riendo y pensando que estoy loco, pero Matt Carroll es el tercer jugador con más partidos en la historia de los Bobcats y merece estar en las menciones especiales. Está en el Top 10 de la mayoría de los apartados estadísticos del equipo y aunque sus promedios con los Bobcats (7.4p y 2.1 rebotes) no son nada espectaculares, es posiblemente el mejor triplista puro que ha vestido la zamarra de los de Charlotte.

KEMBA WALKER: No podía faltar el que, si nada cambia, se convertirá en uno de los mejores jugadores de la historia del club. Aunque ha sido incapaz de liderar a su equipo hacía una buena dinámica y vivió en su temporada 'rookie' el peor récord de la historia de la NBA, Kemba Walker  nos ha demostrado que calidad y actitud no le falta. Promedia 16 puntos por partido a lo largo de su carrera, 3.7 rebotes y 5.1 asistencias. ¿Superará a Gerald Wallace y llevará a los Bobcats a ser un equipo temible?

DJ AUGUSTIN: Finalmente me decanto por el base antes de por Jason Richardson porque Augustin estuvo más años en Carolina del Norte, aunque en sus dos años, Richardson promedió más de 20 puntos por partido. El base, en cambio, tiene unos promedios de 10.9 puntos y 4.4 asistencias por partido, vivió los Playoffs y dejó buenos detalles pero nunca supo cumplir con las expectativas que levantó, ya que muchos esperaban que fuese la siguiente estrella del equipo.

BORIS DIAW: El francés pasó 4 años en Charlotte, y aparte de en la última, rindió a un buen nivel, mostrándonos su inteligencia y su alta capacidad para asistir para tratarse de un interior. Jugador chapado a la europea, promedió durante estos 4 años 11.6 puntos, 5.3 rebotes y 4.4 asistencias, siendo tercer máximo reboteador de la historia de la franquicia, y cuarto máximo asistente. Aunque en determinados momentos se le vio algo pasado de peso, seguramente su etapa en los Bobcats ha sido la más fructífera de su carrera, al menos a nivel individual.

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